Qué ver en Luarca
Dicen de Luarca que es uno de los lugares más especiales de Asturias (difícil elegir en estas tierras). Quizás por su magia o energía, la localidad dio a luz y sus calles acogieron en su infancia a uno de los premios Nóbel más importantes de la historia: Severo Ochoa, el investigador y médico, hito en la evolución de la medicina evolutiva mundial.
Situada en el noroeste de la península, en la zona oriental de la costa de Asturias y bañada por el Mar Cantábrico, es una de esas joyas escondidas en las que el tiempo parece pasar muy despacio. Conocida como “la Villa Blanca de la Costa Verde”, combina en perfecto equilibrio la tradición marinera más pura, un paisaje espectacular y una cultura vibrante para vivirla en primera persona.
En cualquier escapada a Asturias, Luarca siempre debería ser una parada obligada para disfrutar y recrearse en la esencia más pura de la región, ya que se trata de uno de los pueblos más encantadores de Asturias. No te pierdas los puntos más representativos e interesantes del lugar para impregnarte de su autenticidad.
1. El puerto de Luarca
Uno de los puntos más icónicos que ver en Luarca es sin duda alguna, el puerto. Es la imagen más repetida pero que jamás pierde su encanto. Este es uno de esos puertos pesqueros de toda la vida que parece estar ajeno al paso del tiempo.
Afincado justo en una ensenada natural fue en antaño uno de los puertos más importantes del principado (por su localización natural). Su amplia extensión en comparación con las dimensiones del pueblo y la gran cantidad de embarcaciones de pesca que lo habitan nos enseñan que hoy en día, la principal actividad de la zona sigue siendo la pesca.
Como todos los puertos pero aún más los que están bañados por mares más fríos, el puerto de Luarca tiene un olor especial mezcla indiscutible de salitre, gasóleo y brasas de la lonja de asar el pescado fresco. Yo siempre recomiendo disfrutar de este aroma dando un paseo al atardecer o mucho mejor, tomando algo rico en los numerosos bares y restaurantes que hay a “pie de pantalán”.
2. La lonja pesquera
En el propio puerto, como no podría ser de otra manera, está la Lonja. Es el espacio donde de toda la vida se “subasta el pescado” recién traído del mar a prontas horas de la madrugada.
En la lonja del puerto de Luarca hay un espacio habilitado para comer con largas mesas para compartir y una impresionante barbacoa en la que el pescado a la brasa va saliendo constantemente. ¿Algo más fresco, rico y auténtico?
No te vayas sin comerte unas sardinas y un pulpo a la parrilla, eso sí, con una buena sidra.
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3. Iglesia de Santa Eulalia
La Iglesia de Santa Eulalia está justo al salir al puerto desde el casco histórico del pueblo (o al entrar al pueblo desde el puerto, según se venga). Tan pronto vayas caminando, se alza bien imponente en la calle de Párroco Camino, la peatonal más concurrida.
El edificio actual es de finales del siglo XVIII y principios del XIX aunque para descubrir sus orígenes hay que mirar hacia la época medieval, durante el s. XIII. En su interior se encuentra su “gran joya”, un importante retablo mayor de estilo rococó referente a Santa Eulalia de Mérida (una mártir cristiana del s. III).
4. Faro de Luarca
Todos los faros son especiales y tienen una energía única pero el de Luarca, al menos para mí, aún más. Estuve allí pintándolo (para mi proyecto de faros) durante más de una hora y me fascinó el ambiente y la tranquilidad que allí arriba pude disfrutar.
Ubicado en la parte alta del pueblo, en un impresionante desfiladero, desde el Faro de Luarca se tiene una vista exclusiva de todo el litoral: playas cercanas, acantilados…
Guardando el conjunto histórico de La Atalaya, este pequeño faro ilumina el extremo septentrional de la península del Focicón (hocico grande). Es un edificio singular que a día de hoy representa uno de los mayores reclamos de la zona y un icono del pueblo.
Está a 54 metros de altura y para poder llegar a él hay que subir por todo el barrio del Carambal (el pirata del puente del beso… más abajo te cuento quién es). Su linterna (como se llama a la bombilla o luz de los faros) está en la parte alta de un edificio circular de diez metros de altura que descansa a su vez sobre una base cuadrada.
Su potente luz llega a las 20 millas de distancia lo que ayudaba en su día a que los barcos pudiesen divisar fácilmente la costa y punto de origen al que volver. A día de hoy sigue iluminando a todo el que tenga algún problema y quiera regresar.
La vivienda anexa (en la que seguramente residía el farero) es una pequeña construcción típica asturiana muy reconocible por su tejado de pizarra.
5. Capilla de la Atalaya – Cementerio – Mesa de los Mareantes
Subir hasta el punto más elevado de Luarca no solo te permitirá disfrutar de las vistas y conocer el faro sino que todo el conjunto (La Atalaya) es sumamente interesante.
Lo completan la capilla que recibe el mismo nombre (de la Atalaya) o de Nuestra Señora la Blanca, patrona de los marineros de Luarca y uno de los cementerios más fotografiados de nuestro país (en el que además descansa de su interesante vida, el premio Nobel, Severo Ochoa).
Por último, es muy interesante ver la Mesa de los Mareantes. Una construcción compuesta por un cañón, un ancla y una mesa de pizarra alrededor de la cual los nobles del gremio de los mareantes y navegantes se reunían para la toma de decisiones en el siglo XV.
6. Puente del Beso, imprescindible que ver en Luarca en un día
Los más románticos están de enhorabuena y es que en Luarca hay un puente que honra a la mayor expresión de amor: el Puente del Beso.
Justo antes de llegar a la desembocadura del río Negro en el mar encontramos este pequeño y bonito puente de barandilla blanca cuyo nombre le viene a raíz de la leyenda del Pirata Cambaral (que también da nombre a un barrio de Luarca).
Según cuenta la historia, este pirata fue apresado por las autoridades luarquesas. Durante su prolongado cautiverio cayó rotundamente enamorado de la hija del gobernador de la localidad que al enterarse del idilio y la fuga que ambos planeaban, los ejecutó y decapitó en el lugar donde hoy se levanta el puente.
Una bella o horrible forma de terminar un romance, según se mire.
7. Mirador del Chano (Capilla San Roque y San Martín)
En Luarca te hará falta un poco de fondo físico si quieres disfrutar de las mejores vistas y es que ascendiendo por sus colinas se encuentra un nuevo mirador, el del Chano que, sin duda, bien merecerá el esfuerzo.
Este mirador incluye varios puntos en diferentes alturas desde los que vislumbrar toda la costa y el propio pueblo. Llegando hasta el más elevado se puede contemplar una panorámica 360º que incluye el puerto, las playas, el centro urbano, la desembocadura del río, la ermita de la Blanca, el cementerio y el faro. ¡Un espectáculo!
Una vez arriba, no puedes perderte las dos capillas que allí habitan: la de San Roque y la de San Martín.
Otro buen mirador lo encontrarás si pones en el mapa «Mirador de Luarca»:
*Para hacerse mejor una idea, Luarca está construida como si de un anfiteatro se tratara por lo que existen alrededor diferentes miradores desde los que obtener diferentes vistas.
8. Antiguo barrio de la Pescadería
Bajo el mirador del Chano se ubica el antiguo barrio de la Pescadería, el más típico de la zona. Sus estrechas calles sin orden ni sentido así como la inclinación de las mismas, han conseguido conservar el auténtico carácter marinero.
No esperes encontrar ninguna pieza histórica ni un mirador (más que el de arriba, el del Chano). Lo especial de este punto es él mismo, callejear por él y trasladarse a otro momento de la vida y la historia no tan lejana pero que parece muy dejada atrás a razón de la velocidad de todo hoy en día.
9. Jardines de la Fonte Baixa
Pero no todo es mar y pesca en Luarca y de veras que todo el entorno es un auténtico tesoro. Este pequeño pueblo además esconde un espectacular jardín botánico de más de 20 hectáreas de extensión.
Un trocito de paraíso en que pasear entre fuentes, esculturas, miradores y un amplio abanico de flora diversa con un verde intenso que cautiva al primer vistazo. Gracias al clima húmedo tan especial de Asturias, este jardín botánico es pura vida y energía.
El acceso se encuentra junto a la 2ª playa, en una escalinata ascendente. Allí, en el punto de entrada, recibirás un mapa con el que decidir qué ruta realizar. También puedes optar por esta visita guiada por el Jardín de la Fonte Baixa.
10. Museo Severo Ochoa
Uno de mis grandes descubrimientos en mi segunda visita a Luarca ha sido aprender sobre el gran Premio Nóbel de nuestro país: Severo Ochoa (1905 – 1993).
En esta villa nació y vivió durante su infancia el célebre investigador y científico que revolucionó la medicina de mediados del siglo XX gracias a sus estudios sobre los procesos biológicos esenciales (campo de la bioquímica y la genética molecular).
En el centro de Luarca hay numerosas referencias a su ilustre vecino incluyendo el Museo Severo Ochoa que recopila los momentos más relevantes de su trayectoria así como los hitos que regaló a nuestra humanidad.
Si te gusta la ciencia, la historia y saber más sobre nuestros grandes, es un lugar que visitar en Luarca muy interesante.
11. Palacio de los Marqueses de Gamoneda
El último punto de mi visita por Luarca que estoy convencida que te encantará es el Palacio de los Marqueses de Gamoneda. Un edificio con historia que data del siglo XVII y que durante toda su historia ha albergado a familias aristócratas y relevantes de la región.
Es muy representativa su arquitectura elaborada con abundancia de columnas, frontones y balcones de hierro forjado. En la visita interior podemos hacernos una idea de cómo era la vida noble de la época ya que aún conserva algunos muebles de antaño, obras de arte y techos decorados con detalle.
Actualmente está muy bien conservado y goza de restauraciones periódicas. Está abierto al público de forma general y es el escenario de algunos eventos culturales y exposiciones.
Dónde alojarse en Luarca
Dormir en un hotel en Luarca, levantarse y dar un paseo antes de que todo despierte por el puerto, es uno de esos regalos de la vida que quedan guardados para siempre en nuestra memoria.
Entre los hoteles más comentados del centro, están:
- Hotel Villa de Luarca: 3***, a 100 metros del centro.
- Hotel Finca Portizuelo: 3***, a 1,5 km del centro.
- Hotel Dabeleira: 2**, a 300 metros del centro.
- Hotel La Colmena: 2**, a 50 metros del centro.
Si quieres alojarte en otra zona de la región, echa un vistazo a esta guía sobre dónde alojarse en Asturias.
Playas de Luarca
Además de los puntos de interés turístico más habituales e imprescindibles de Luarca, en la zona también se encuentran bellas playas para disfrutar de un buen día de sol o pasear al atardecer.
Dentro del propio pueblo o casco urbano están los conocidos como “los 3 arenales” que son las playas más visitadas por los lugareños de la zona.
La 1ª y 2ª playas son las que están más cerca del centro y a las que se puede acudir dando un agradable paseo. Avanzan sobre una gran ensenada natural resguardada por sendos espigones lo que hace que el oleaje no sea muy pronunciado.
La playa de Salinas o 3ª de Luarca es sin duda alguna, totalmente imprescindible ir a verla. Es un espectáculo para la vista y seguro, querrás quedarte allí más tiempo para respirar de su tranquilidad, encanto y paisaje único.
*La playa dispone de un parking con bastantes plazas disponibles aunque si estás alojado en el pueblo, se puede ir dando un paseo.
Qué ver cerca de Luarca, Asturias
Una vez terminada la visita en Luarca siempre es interesante aprovechar para conocer la zona y es que Asturias tiene infinidad de rincones únicos. Cada vez que se va, hay algo nuevo por ver.
Cerca de Luarca, yo recomendaría:
- Cabo Busto: A muy pocos kilómetros del centro, este cabo rocoso conquista por sus vistas. Es una paseo para los amantes de la naturaleza entre árboles y flora vírgenes. Aquí podrás ir a una popular pastelería llamada Pastelería Cabo Busto.
- Reserva Natural de Barayo: Al oeste se encuentra esta reserva natural compuesta por playas, dunas, bosques y lagunas desde la que observar aves propias del entorno.
- Taramundi: Una hora y pocos kilómetros separan Luarca de este pequeño pueblo, Taramundi, conocido por su ancestral tradición de cuchillos y navajas artesanales. Cuenta además con una zona muy rural que se escenifica a la perfección en el Museo de los Molinos de Mazonovo.
Por supuesto, si estás en Luarca, no dejes de ir a Cudillero… El pueblo de “las cuestas” que tiene a todo el mundo enamorado y del que puedes descubrir más detalles en este artículo sobre qué ver en Cudillero en un día.
Mapa para visitar Luarca
En el siguiente mapa de Luarca puedes ver todos los lugares ubicados en esta bonita localidad asturiana mencionados a lo largo del artículo. También puedes ver los hoteles recomendados y las playas del lugar, además de las recomendaciones gastronómicas que te doy más abajo.
🍽️ Para comer en Luarca, cualquier sitio estará genial, sobre todo si apuestas por pescado que seguro será fresco del día. Sin duda, La Farola y el Barómetro serán dos apuestas seguras.
Espero que este artículo sobre qué ver en Luarca te ayude a organizar tu próxima visita a este rincón con encanto del norte de España. Si eres un amante de Asturias y puedes dedicarte unos días para conocerla a fondo, estas guías te llevarán por Asturias en 5 días o Asturias durante 7 días.
